≡ Menu

Solemnidad Del Nacimiento de Juan El Bautista- “Es necesario que El crezca, y que yo disminuya”

Suscribete
Suscribete
Siguenos
Twitter
Visit Us
Follow Me
RSS

La Iglesia celebra la fiesta de los santos en el día de su de su muerte. En el caso de San Juan Bautista, se hace una excepción y se celebra el día de su nacimiento porque él fue santificado en el vientre de su madre cuando la Virgen María, embarazada de Jesús, visitó a su prima Isabel, según el Evangelio.

Todos al momento del nacimiento de Juan luego llamado el Bautista estaban asustados y asombrados por los misteriosos eventos. La historia del nacimiento de Juan hace eco con el Antiguo Testamento. Dios se le apareció a Abraham prometiéndole que su esposa le daría un hijo; Anunció el nombre del hijo y el papel que jugaría Isaac en la historia de la salvación Génesis 17: 1, 16, 19.

Lo mismo le sucedió a Zacarías y a Elizabeth. Por medio de su ángel, Dios anunció el nacimiento de Juan a esta pareja justa pero estéril. Les hizo llamar al niño Juan, y les dijo la parte que Juan desempeñaría en el cumplimiento de su plan Lucas 1: 5-17.

San Pablo dice que Juan anunciaría el cumplimiento de todas las promesas de Dios a los hijos de Abraham (Lucas 1:55, 73). Es muy común asociar a Juan con su ardiente predicación Mateo 3: 7-12. Pero había una profunda humildad en el corazón de su misión. Pablo alude a eso cuando cita las palabras de Juan acerca de no ser digno de desatar las sandalias de los pies de Cristo. Juan dijo, “El (Cristo) debe crecer y yo debo disminuir “(Juan 3:30).

Debemos tener esa misma actitud cuando buscamos seguir a Jesús. El arrepentimiento que predicó Juan fue un alejamiento del pecado y del egoísmo y un cambio de nuestros corazones al Padre.

Debemos disminuir para que, como Juan, podamos fortalecernos en el Espíritu, hasta que Cristo se manifieste en cada uno de nosotros. Sigamos el ejemplo de la Santísima Virgen que se convirtió en la esclava del Señor para que así se hiciera la voluntad de Dios.

Les recomiendo que lean:

  • Ezequiel 49: 1-6
  • Salmo 139: 1-3, 13-15
  • Hechos 13: 22-26
  • Lucas 1: 57-66, 80

¡Santa Maria Ora Pro Nobis!