La resurrección de Jesús es el hecho histórico y espiritual más importante de la fe cristiana. Si Jesucristo no hubiese resucitado; Él hubiese sido otro de muchos profetas asesinado por sus creencias. La gran mayoría de los historiadores y estudiosos reconocen, que el mensaje de la cruz y la resurrección fué la causa de un cambio en el mundo conocido y que a través de los mártires y de siglos de persecución, el cristianismo triunfó sobre el imperio romano y logró cambiar la historia de la humanidad para siempre.
Para nosotros los cristianos no es tan solo una batalla aquí en la tierra, sino que se trata de poder observar las primicias que nos esperan en la Gloria eterna, después de la victoria de Dios sobre la muerte y el pecado.
A continuación, enumero 4 objeciones o argumentos en contra de la resurrección. Vamos a contestar cada una de ellas brevemente, para que así podamos explicarles a otros, lo que por fe creemos y vivimos.
El primer argumento es Jesus nunca Murió en la Cruz:
Algunos de los no creyentes y escépticos piensan que tal vez Cristo no murió en la Cruz y esto explica la leyenda de la resurrección.
En contra de esto podemos decir sin ninguna duda que los romanos eran expertos crucificando personas.
Los Romanos tenían un historial extenso cuando se trataba de ejecutar y castigar asesinos. Arqueólogos han encontrado cientos de decenas de cadáveres de la época de Cristo, los cuales presentan evidencia de que fueron crucificado. Esto muestra, que Jesus no fue el primero o uno de pocos, sino que era uno de muchos, que fue crucificado. Dice el refrán que la practica hace al maestro.
Además, los Romano siempre revisaban los cuerpos antes de bajarlos de la cruz, para asegurarse de que estuvieran muertos. La mayoría de las veces se les quebraban las piernas, para que así dieran el último suspiro. Tengamos en consideración, que la víctima colgada en la cruz obtenía el soporte de su cuerpo a través de los pies, que también estaban clavados al madero. Cuando los Romanos les quebraban las piernas, causaban a las víctimas otros daños mayores, que aceleraban su muerte. En el caso de Jesus, la Biblia nos dice, que Él expiró y murió antes de que le quebraran las piernas. Las Sagradas Escrituras con lujo de detalles nos dicen, que el soldado Romano en esta ocasión hizo algo mucho más certero. El soldado tomó una lanza y le traspasó el costado. ¿No crees que fué suficiente para asegurarse de que estaba muerto?
En 1996 la American Medical Association hizo la declaración de que hubiese sido imposible para Jesús o cualquier otro ser humano, sobrevivir una crucifixión por parte de los Romanos de aquella época.
Las escrituras y los documentos históricos certifican que Jesus fue bajado de la cruz muerto. Si Jesús no hubiese estado muerto, quiere decir que nuestro Señor se tuvo que haber quedado esperando en la tumba, hasta que los guardias se durmieran y todo mal herido salir de ella. ¿Te imaginas a Jesús herido y desangrado empujando la roca? ¡Hubiese sido imposible! La Biblia nos hablas de las torturas que recibió Nuestro Señor y éstas fueron severas. Jesus recibió latigazo, le colocaron una corona de espina y le trapazaron sus manos y pies con clavos. Como si fuera poco y como mencionamos anteriormente, tambien le perforaron con una lanza el costado. Tampoco le dieron de comer, ni de beber y cargó con la cruz a pies hasta el Gólgota. Definitivamente, esta idea de ver un Jesús mal herido escapando de la escena es imposible de comprender.
Pero si la consideramos, esto significa que los discípulos hubiesen tenido que darle atención médica y creo que estamos de acuerdo que en tres días, Él no hubiese estado en óptimas condiciones como nos describen los testimonios de las mujeres, los discípulos de Emaús y el de los 11 apóstoles. Estos testimonios están muy bien documentados en los Evangelios.
- Otro detalle es que los discípulos hubiesen sabido que Jesús no se había muerto y por consecuencia la historia y los testimonios hubiesen sido totalmente diferentes.
Algunos dicen que tal vez los apóstoles no sabían reconocer un fantasma y por esto, aunque Jesus no había muerto, dijeron que había resucitado. Sobre este punto los evangelistas hacen un excelente trabajo, al narrarnos como Jesus les mostró las marcas de las manos y los pies. Además, también dicen que comieron con Él. Así que tienen razón no eran un fantasma y esto los discípulos lo sabían. Jesús resucitado es el mismo Jesús que fue crucificado y los Evangelio no contradicen esta idea.
El segundo argumento es que no lo pusieron en la Tumba.
Está documentado en la Biblia (Mateo 27:60) y en los otros tres Evangelios muy detalladamente, que Jesús fue sepultado en la Tumba personal de José de Arimatea; para colmo este José de Arimatea era miembro del consejo que acusó a Jesús. ¿No crees que si están inventando una historia, sería un error nombrar uno de los miembro de los líderes judíos que acusaron a Jesús?
Los que defienden este argumento, lo que quieren decir, es que nadie sabía exactamente donde estaba Jesús sepultado y por eso pensaron que había resucitado. Lo que esto no explica, es él porque cada uno de los individuos que creían que Jesús resucitó, estuvo dispuesto a dar la vida por algo que no era supuestamente certero.
El tercero es Alucinaciones
Algunos dicen tal vez ellos pensaron que vieron a Jesús, pero en verdad no vieron nada.
Gary R Collins (psicólogo) dice que solo una persona tiene una determinada alucinación. No pueden darse al mismo tiempo. La Biblia nos presenta múltiples apariciones de Cristo resucitado y siempre a más de una persona. En algunos casos a grupos de personas. Según la ciencia y la psicología es imposible que un grupo de personas tenga la misma alucinación y que cada uno de los presentes la tenga al mismo tiempo exactamente igual.
Otro punto que convence relacionado a que no fueron alucinaciones, es observar como también los enemigos de la Iglesia naciente comenzaron a creer. El mejor ejemplo es Saulo, quien se convirtió en San Pablo, después de haber visto al Señor Resucitado.
El cuarto argumento es el porque fueron a ver La Tumba Vacía
Algunos dicen que si los discípulos creyeron ¿Porqué fueron a ver la tumba?
Jesús se le apareció a Magdalena y a otros, antes que a los discípulos y las Sagradas Escrituras dicen, que Pedro y Juan creyeron cuando vieron la Tumba vacía. La acción de Juan y Pedro no debe de verse como una señal de que no creían en la posibilidad de la resurrección, sino como un gesto muy normal y humano. Además, que aquí se muestra que los discípulos sí conocían donde habían enterrado a su maestro.
Los relatos bíblicos dicen en específico, que las mujeres encontraron el sepulcro vacío primero (vieron a Jesús primero). Esto muestra la honestidad de los textos Bíblicos y de los Evangelistas, ya que decir que Jesus apareció primero a mujeres, era bochornoso y denigrante para la cultura judía.
Luego en la historia los apóstoles comenzaron a predicar en Jerusalén. ¿No hubiese sido más fácil irse lejos? Este dato es importante, porque su audiencia podía ir a la Tumba y verificar los testimonios. Realmente los discípulos no tuvieron la posibilidad de mentir, teniendo tantos testigos de los hechos ocurridos a su alrededor y predicando en el mismo lugar en que ocurrieron.
Otros escépticos se atreven a decir que se robaron el cuerpo, pero esto no nos explica los actos heroicos, los sacrificios y la entrega de sus propias vidas de los discípulos de Jesús por algo que era una mentira. Además, la Biblia nos responde este argumento:
El sábado se reunieron los principales sacerdotes y fariseos ante Pilato, diciendo: “Señor, nos acordamos que aquel engañador dijo, viviendo aún: Después de 3 días resucitaré. Manda, pues, que se asegure el sepulcro hasta el 3er día, no sea que vengan sus discípulos de noche, lo hurten, y digan al pueblo: Resucitó de entre los muertos. Y será el postrer error peor que el primero. Y Pilato les dijo: Ahí tenéis una guardia; id, aseguradlo como sabéis. Entonces ellos fueron y aseguraron el sepulcro, sellando la piedra y poniendo la guardia” (Mateo 27: 62 – 63).
Luego de la resurrección
“de la guardia fueron a la ciudad, y dieron aviso a los principales sacerdotes de todas las cosas que habían acontecido. Y reunidos con los ancianos, y habido consejo, dieron mucho dinero a los soldados diciendo: Decid vosotros: Sus discípulos vinieron de noche, y lo hurtaron, estando nosotros dormidos. Y si estando nosotros dormidos. Y si esto lo oyere el gobernador, nosotros le persuadiremos, y os pondremos a salvo. Y ellos, tomado el dinero, hicieron como se les había instruido. Este dicho se ha divulgado entre los judíos hasta el día de hoy”. (Mateo 28: 11 – 15).
Con estos versículos y con lo ocurrido, se puede confirmar que los soldados fueron sobornados para decir esto, ya que era una gran humillación para los guardias. Ellos implicaron que los mismo que no se atrevieron a estar a los pies de la Cruz, llegaron armados y aunque eran pescadores sin ningún adiestramiento militar, lograron robarse el cuerpo de Cristo. Difícil de creer ¿verdad?
En conclusión, la mejor respuesta y la que ha convencido a muchos, es observar la vida de todos los discípulos y la de los primeros cristianos. Todos dieron la vida por Jesús y no obtuvieron grandes ganancias materiales. Nadie actúa de esta manera por algo que es falso. Nadie da la vida por una idea que no es cierta.
Espero que con este artículo puedas defender mucho mejor la resurrección de Nuestro Señor Jesucristo y que compartas con confianza tu fe cristiana. Nunca olvides que nuestra fe no está basada en cuentos, sino que están basada en una persona y esa persona es Jesucristo Vivo y Resucitado.
En Cristo, Luis Román
Feliz día de la Resurrección
Santa Maria ora pro nobis