San Pablo señala a Abraham como un modelo de fe (Romanos 4: 3). Es muy atractivo cuando escuchamos que la fe es un regalo de Dios. La fe es una de las virtudes teologales. La fe junto con la esperanza y la caridad (amor) están infundidas por la Gracia divina. Además, al ejercer fe o al creer, nos acercamos a Dios. Además de eso, no puede haber maldad en tener una cantidad ilimitada de fe, esperanza o amor, cuando Dios es el objeto de esa virtud. San Pablo nos dice exactamente esto cuando escribe en Romanos 4: 3-4 “Abraham creyó a Dios, y se le acreditó como justicia”. No podemos olvidar que el salario de un trabajador no se acredita como un regalo, sino como algo que se debe.

Es debido a Dios que nuestra fe es hacia Él. Dios, en términos humanos, caminó primero por el camino. A Abraham le fue acreditado como justicia, pero Dios recibió toda la gloria y alabanzas. Acerca de la ofrenda en Génesis 15:17, no dice que Abraham fue y realizó un horno humeante y una antorcha de fuego y simplemente las trajo. Fue el Señor quien realizó esta señal. El Señor que realizó una señal de sacrificio. ¿Por qué? Porque, lo que tenemos aquí es el regalo de una alianza regalada o brindada por parte de Dios

Para nuestra sociedad moderna, ser obedientes y aceptar nuestro lugar en el universo es algo difícil de entender. Nosotros, como humanos, creemos que somos dueños de nuestro destino y que somos libres de decidir. Creo que este es el punto de la fe de Abraham más difícil de entender para muchos. Cómo obedeciendo fielmente a DIOS podemos encontrar y obtener las virtudes teologales. Estas virtudes son los mejores regalos que podemos recibir.

Como ejemplo, podemos ver en nuestros tiempos cómo nuestra sociedad ha vuelto sus mentes al positivismo, y toda la nueva era y creen porque sienten que tienen el control. Por el contrario, nuestra fe cristiana nos desafía a tener amor por Dios, esperarlo solo a él y creer por él. Técnicamente, nos negamos libremente a ser libres para ser parte de Él. Esto es lo que Cristo nos enseña y es lo que Abraham y el Antiguo Testamento está revelando. Es esto también lo que el Nuevo Testamento cumple en la Persona de Cristo.

Estamos llamados a ser otro Cristo en este mundo y a mostrar Fe, Esperanza y Caridad a nuestros vecinos.

En Cristo Luis Roman

Santa Maria ora pro nobis